¿Qué es eso de la procrastinación?
¿Cuántas veces te has dicho ese «mañana empiezo»? ¿Y cuántas veces ese «mañana» (por lo que sea) nunca llega? En psicología hemos acuñado el término Procrastinación para definir ese mañana inexistente en el que vamos a hacer todo-todo (pero todo) lo que nos hemos propuesto.
La procrastinación, por tanto, es esa actitud que nos lleva a postergar cualquier acción que, estimamos, nos va a generar algún tipo de malestar emocional: aburrimiento, tedio, cansancio, tristeza… El mero hecho de aplazar esa acción nos proporciona un alivio inmediato que refuerza, curiosamente, la propia actitud procrastinadora.
Pero, mantener la procrastinación durante un periodo largo de tiempo, nos puede llevar a sentirnos más ansiosos y tristes de forma habitual y, sobretodo, normalizada. Además de que, en algunas personas, se les pueden llegar a acumular tareas o cronificar tomas de decisiones que pueden acabar desembocando en un trastorno de ansiedad o del estado de ánimo. Puede colaborar, también, en el deterioro de la autoestima y en el aumento de los niveles de estrés diarios.
Los seres humanos procrastinamos de todo. Desde lo cotidiano como llamadas, mails, deadlines… hasta temas muy importantes como rupturas, cambios de trabajo, discusiones, comenzar psicoterapia o un tratamiento médico.
Casi nada de lo que dejes para más adelante se va a ir o solucionar por si mismo. Incluso algunas situaciones pueden aumentar en gravedad, en el futuro, si no las enfrentamos en el presente. Lo procrastinado se va a quedar ahí esperando por ti. Acumulándose en una mochila imaginaria que, poco a poco, va ganando peso. Te agota emocionalmente y va enlenteciendo tu camino.
Existen muchas herramientas cognitivas y conductuales como las que aparecen en este artículo del COP de Madrid que nos pueden resultar útiles en muchos momentos. Es importante saber que el origen y los motivos para procrastinar son múltiples. En terapia se van descubriendo y trabajando qué es lo que te influye a ti para estar en esa rueda y que, progresivamente, puedas salir de ella y recuperes tu bienestar.
Una de las claves más importantes de la procrastinación es la evitación de las emociones desagradables que, como ya hemos visto, casi en ningún caso nos va ayudar. Aprender a gestionarlas y focalizar mi atención en el bienestar psicológico que voy a obtener a largo plazo si realizo esa acción en este momento. En vez de priorizar el alivio inmediato de las emociones desagradables, que he asociado a la realización de dicha acción, al evitarla o postergarla.
Recuerda, si estás en esa rueda de la procrastinación, como dijo Karen Lamb:
– Karen Lamb
«Un año más tarde desearías haber empezado hoy»
Si crees que necesitas ayuda para gestionar la procrastinación, puedes solicitar cita a través del correo electrónico: sypcoruna@gmail.com o dejándonos un WhatsApp en el: 717 704 148. Recuerda que tienes la opción de elegir entre terapia online o terapia presencial en A Coruña ciudad.
